Para cuidar la imagen tras el diagnóstico de cáncer, ‘es fundamental comenzar cuanto antes a mejorar los niveles de hidratación, tanto facial como capilar, así como tratar el cuero cabelludo, para que esté en las mejores condiciones posibles y conseguir neutralizar al máximo los efectos que los fármacos tienen sobre la piel’.
Existen productos y servicios destinados específicamente a estas pacientes:
LAS PELUCAS: es necesario que los interiores sean lo más suaves posible para no producir irritaciones en el cuero cabelludo; además, es fundamental que no se adhieran al cuero cabelludo con pegamentos, ya que podemos provocar una lesión en el mismo y pasar de una alopecia por quimioterapia (el cabello vuelve a crecer una vez se acabe con la medicación) a una alopecia cicatricial, en la que no vuelve a crecer el cabello en la zona.
CREMAS: es muy importante utilizar cremas con unas características especiales: libres de perfumes, conservantes y derivados del petróleo, fórmulas simplificadas para evitar posibles reacciones alérgicas…
HIGIENE PERSONAL: es importante encontrar desodorantes sin aluminio en su composición.
Asesoramiento para aprovechar las técnicas estéticas: cómo ponerse la peluca, pautas de maquillaje, cómo maquillarse las cejas, consejos de higiene e hidratación facial…